Guinea-Bissau (nombre oficial, República da Guiné-Bissau, República de Guinea-Bissau), república ubicada en el noroeste de África, limitada al norte por Senegal, al este y sur por Guinea y al oeste por el océano Atlántico. El país cuenta con unas 60 islas en la costa, entre las que destacan las Bissagos (Bijagós). Tiene 36.125 km² de superficie.
La mayor parte de Guinea-Bissau es una llanura costera baja y pantanosa. El territorio se va elevando gradualmente hasta formar una zona con forma de meseta en el este. La altura máxima se encuentra hacia el sureste y alcanza los 300 m. Hay numerosos ríos meandriformes que cruzan el país de oeste a este y forman amplios estuarios cerca de sus desembocaduras; casi todos son navegables y sirven como importantes arterias para el transporte. El clima es tropical, con una temperatura cuyo promedio anual es de 25 ºC; la estación de las lluvias tiene lugar de junio a noviembre y el promedio de precipitaciones en Bolama es de 2.184 mm. La vegetación está formada por manglares y selvas tropicales en la llanura costera y una sabana arbolada en la meseta interior que proporciona importantes recursos al país, como son las maderas tropicales duras. Aunque no se extraen minerales, existen depósitos de bauxita, fosfatos, cinc y cobre; en la costa existen yacimientos petrolíferos.
La población de Guinea tiene un acceso muy limitado al suministro de agua potable y a la sanidad. El vertiginoso crecimiento de la población es más rápido que las mejoras en la producción agrícola. Aproximadamente la mitad del país está arbolada, aunque un 0,43% se pierde cada año. Recientemente el gobierno ha creado un parque nacional y algunas reservas. Otros problemas ambientales de Guinea son la desertización, la contaminación del suelo, la erosión y la sobreexplotación pesquera.
De acuerdo con el censo de 1979 Guinea-Bissau tenía una población de 777.214 habitantes; en 2008 la estimación fue de 1.503.182 habitantes. La capital y principal puerto, Bissau, tenía una población (según estimaciones para 2003) de 336.000 habitantes. Cacheu y Bolama son otros de sus puertos. Los principales grupos étnicos son los balante, fulani, mandyako, malinké y pepel; los originarios de Cabo Verde forman una pequeña pero significativa minoría. En cuanto a la religión, cerca del 65% de la población sigue las creencias tradicionales, y alrededor de un 30% (principalmente fulani y malinké) son musulmanes; aproximadamente un 5% de la población es cristiana. El idioma oficial es el portugués, pero el crioulo (criollo), una fusión de elementos portugueses y africanos, está muy extendido. En el curso 1994–1995, 100.369 alumnos cursaban estudios en 1.235 escuelas primarias. La tasa de escolarización en enseñanza secundaria era de un 20%. El país cuenta con varias escuelas de formación de maestros que sirven de soporte para los programas gubernamentales tendentes a reducir la alta tasa de analfabetismo de adultos. La tasa de alfabetización en 2005 era del 44,8 por ciento.
La economía de Guinea-Bissau está dominada por una agricultura de subsistencia, cuyos cultivos fundamentales de subsistencia son arroz (el alimento básico de la población), llantén, mandioca y maíz. Los principales cultivos comerciales son el maní cultivado en el interior, los productos de las palmeras que crecen en las islas y la zona costera, y los anacardos. La industria pesquera está creciendo muy rápidamente (6.200 t en 2005) y es una de las principales fuentes de ingresos de divisas. En el interior tiene importancia la ganadería. La industria se limita a la transformación de materias primas y la producción de bienes de consumo básicos. El país cuenta con 3.455 km de carreteras, de las cuales están pavimentadas sólo el 28%. La moneda es el peso, dividido en 100 centavos (522,90 pesos equivalían a un dólar estadounidense en 2006). La Constitución aprobada en 1984 y revisada en 1992 establece que el poder ejecutivo recae en el presidente de la República, elegido mediante sufragio universal, y el poder legislativo en la Asamblea Nacional Popular, formada por 102 miembros. En 1991 se estableció un régimen de democracia multipartidista.
La historia más antigua de Guinea-Bissau es poco conocida, aunque parece que algunos de los grandes grupos étnicos del país, como los balante y los pepel, se establecieron en el siglo XII. En 1446 Nuno Tristão, un mercader de esclavos portugués, visitó la región que pasó a convertirse en un importante centro del comercio de esclavos. En 1687 se estableció un puesto comercial portugués en Bissau, pero la pretensión portuguesa fue disputada por los franceses y británicos; estos últimos tuvieron durante un corto periodo un asentamiento en Bolama. En 1879 la región pasó a ser una colonia portuguesa y las disputas con Francia sobre las fronteras terminaron con el acuerdo de 1886. Sin embargo, hasta 1915 los portugueses no pudieron ejercer un poder efectivo sobre el país.
En 1952 Guinea-Bissau pasó de ser una colonia a convertirse en provincia de ultramar; poco tiempo después apareció un movimiento nacionalista, liderado por el Partido Africano para la Independencia de Guinea-Bissau y Cabo Verde (PAIGC). Después de varios incidentes, el partido inició una guerra de independencia a comienzos de la década de 1960. Hacia septiembre de 1973 los rebeldes habían proclamado una república independiente y buscaban el reconocimiento internacional. El 10 de septiembre de 1974 Portugal dio oficialmente la independencia a Guinea-Bissau. El nuevo país, con la presidencia del líder del PAIGC Luis de Almeida Cabral, estableció el control sobre el comercio internacional y avanzó hacia un estado socialista al autorizar la nacionalización de todas las grandes propiedades. En noviembre de 1980 el presidente Cabral fue expulsado del gobierno tras un golpe militar encabezado por João Bernardo Vieira, que fue proclamado primer ministro. Tras ser elegido en 1984 para un periodo de cinco años, el presidente Vieira y su gobierno, dominado por los militares, sobrevivieron a un intento de golpe de Estado en 1985. En 1994 Vieira fue reelegido de nuevo.
El 7 de junio de 1998, Vieira sufrió otro fallido golpe de Estado, encabezado por el general Ansumane Mané, para derrotar al cual necesitó la ayuda de los gobiernos vecinos de Senegal y de la República de Guinea. El país se vio sumido entonces en una verdadera guerra civil, causante de cerca de 2.500 muertos, a la que se puso temporalmente fin dos meses después, cuando el gobierno de Vieira firmó un alto el fuego con los rebeldes opuestos a su régimen, ratificado en noviembre en territorio nigeriano y por medio del cual se nombraba primer ministro a Francisco Fadul. No obstante, en febrero de 1999 se reanudaron los combates a raíz de una nueva rebelión militar liderada por Mané. La Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (ECOWAS) envió un contingente de tropas panafricanas como fuerza de interposición (denominada Ecomog), pero en mayo de 1999 un nuevo y definitivo golpe de Estado terminó por derrocar a Vieira, quien se refugió en la Embajada de Portugal.
Las fuerzas vencedoras de la denominada Junta Militar, dirigida por el general Ansumane Mané, se hizo entonces con el poder. Fadul negoció con los responsables de la Junta Militar, bajo la mediación portuguesa, la sustitución de Vieira y un plan para impedir la reanudación de cualquier conflicto que incluía una transición pacífica hasta las elecciones legislativas y presidenciales, celebradas en noviembre de ese año y en enero del siguiente, respectivamente. El hasta entonces opositor Partido para la Renovación Social (PRS) venció en los comicios legislativos al obtener 38 de los 102 escaños de la Asamblea Nacional Popular; el PAIGC logró 24 escaños; y Resistencia de Guinea-Bissau (RGB), 28. Las elecciones presidenciales de enero de 2000 dieron el triunfo a Kumba Yalá, del PRS, tras obtener el 72% de los votos emitidos y derrotar al presidente interino (y ex presidente de la Asamblea Nacional Popular), Malan Bacai Sanha, del PAIGC.
El 14 de septiembre de 2003, en un contexto de profunda crisis económica, social y política, Yalá fue destituido tras un golpe de Estado; el principal líder de éste, el general Veríssimo Correia Seabra, se autoproclamó presidente interino del país y estableció el denominado Comité Militar para la Restauración del Orden Constitucional y Democrático. Pocos días después, esta junta encomendó provisionalmente la presidencia del país al independiente Henrique Rosa y la jefatura de gobierno a Artur Sanha (miembro del PRS). En marzo de 2004, en el periodo de transición abierto entonces, se celebraron elecciones para la Asamblea Nacional Popular; el PAIGC, que consiguió 45 escaños (por 35 del PRS, y 27 del Partido Unido Social Democrático), logró que su militante Carlos Gomes Júnior accediera al cargo de primer ministro. Asimismo, tras los comicios presidenciales celebrados el 19 de junio y el 24 de julio de 2005 (en primera y segunda vuelta, respectivamente), Vieira accedió el 1 de octubre, nuevamente, a la jefatura del Estado.