Kazajstán (nombre oficial, Qazaqstan Respublikasy, República de Kazajstán), república situada en Asia central, limita al norte con Rusia, al este con China, al sur con Kirguizistán, Uzbekistán y Turkmenistán, y al oeste con el mar Caspio y Rusia. Fue la República Socialista Soviética Kazaka integrada en la antigua Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).
Con una superficie de 2.717.300 km² aproximadamente —cinco veces la superficie de España—, Kazajstán es, por su extensión, el segundo Estado miembro de la CEI (Comunidad de Estados Independientes). Astana es su capital desde diciembre de 1997, si bien Almaty es su ciudad más populosa e importante.
Kazajstán se compone, en general, de una inmensa llanura de tierras bajas, bordeada de montañas al este y sureste. Las diferencias en altitud en la república son extremas. Las áreas montañosas a lo largo de la frontera con Kirguizistán alcanzan hasta los 5.000 m de altitud, mientras que áreas considerables cerca del mar Caspio están por debajo del nivel del mar. El mar Caspio, el punto más bajo de Europa, se encuentra a unos 28 m por debajo del nivel del mar, mientras que la depresión de Karagiye, localizada al este del Caspio, está a 132 m por debajo del nivel del mar, siendo el punto más bajo de la antigua URSS.
La mayoría de los grandes ríos de Kazajstán desaguan en el interior del territorio, sobre todo en los lagos Zaisan y Baljash, y en los mares Aral y Caspio. La desviación de las aguas de los ríos Sir Daria e Ili, para ser utilizadas como regadío, ha llevado a una disminución en la superficie del nivel del mar de Aral y el lago Baljash. Unos pocos ríos, como el Ishim, el Irtish y el Tobol, discurren en dirección norte hacia el océano Glacial Ártico. La mayoría de los cauces de los ríos pequeños y medianos se quedan secos durante gran parte del año. La precipitación es escasa y por lo general disminuye hacia el sur. Los desiertos y semidesiertos, que contienen eriales de piedras, sal y arena, cubren más de dos terceras partes de la superficie del país.
El clima de Kazajstán es extremadamente continental caracterizado por grandes variaciones de temperatura debido a la extensión del país. La temperatura diaria en enero varía desde -19 ºC hasta -4 ºC de promedio, mientras que la temperatura diaria en julio oscila entre 19 ºC y 26 ºC de promedio. En el verano las temperaturas pueden alcanzar los 45 ºC, y en invierno bajar a los -45 ºC. Kazajstán es el hábitat de algunas especies exclusivas o endémicas, como el antílope saiga que está protegido por decreto gubernamental.
Kazajstán presenta graves problemas medioambientales y de salud como resultado de la Guerra fría. Existen altos niveles de radiación como consecuencia del desmantelamiento de las fábricas de armas nucleares y de las numerosas pruebas nucleares realizadas, tanto subterráneas como superficiales. La contaminación industrial es elevada en muchas ciudades. La pesca en el mar de Aral se ha visto seriamente afectada por el descenso en el nivel del agua como consecuencia de la puesta en marcha de los planes de regadío, que también han agravado la erosión del suelo y la salinización.
Con una población (2008) de 15.340.533 habitantes, Kazajstán es singular entre las repúblicas de la antigua URSS en términos de composición étnica. Los kazakos son el único grupo étnico oficial de las repúblicas de la antigua URSS que forman una minoría en su propio país, menos del 50% de la población total; a pesar de ello, siguen siendo el grupo étnico mayoritario en Kazajstán, con el 43,2% de la población. Los rusos, el segundo grupo, constituyen el 36,5%. La esperanza de vida en 2008 era de 68 años. La densidad de población es de 6 hab/km² aproximadamente.
Hasta hace poco, los rusos superaban en número a los kazakos en la república. A principios del siglo XIX, la inmigración a gran escala aumentó el número de rusos y otros pueblos eslavos, mientras que el número de kazakos descendió como consecuencia de los ataques de los pobladores rusos y la forzada colectivización bajo el régimen de Stalin. Con el tiempo, el número de kazakos aumentó considerablemente al tener la tasa de nacimientos más alta del país. También residen en la república ucranianos (5,2%) y alemanes (4,1%).
Algunos kazakos son seguidores del islam. La lengua oficial del Estado es el kazako, una lengua turca, aunque el ruso es la que más se habla en el país. Sólo un 40% de la población habla kazako, mientras que más de tres cuartas partes de la población hablan ruso.
Casi el 56% de los habitantes de Kazajstán vive en zonas urbanas, por lo que el país tiene el nivel más alto de urbanización entre las antiguas repúblicas soviéticas de Asia central. La ciudad con mayor número de habitantes es Almaty con 1.209.000 (2007). Astana, la capital, tiene 332.000. Otras ciudades importantes son: Qaraghandy (434.300 habitantes), Shimkent (359.600 habitantes), Semei (269.800 habitantes), Pavlodar (320.400 habitantes) y Öskemen (311.300 habitantes). Los eslavos se concentran en el norte del territorio y en las grandes áreas urbanas, sobre todo en Almaty, donde son mayoritarios.
Aunque el desarrollo sanitario es bueno en comparación con el existente en las antiguas repúblicas soviéticas de Asia central, grandes contingentes de la población de Kazajstán han estado expuestas a la radiación de pruebas nucleares. La región cercana a Semey sirvió de lugar de experimentación para la mayor parte de estas pruebas, calculándose en más de 300 las explosiones nucleares subterráneas y varias pruebas en superficie. Otra región donde se realizaron más de 40 pruebas es en la zona próxima al mar Caspio. Desde la independencia no se han realizado más pruebas en su territorio. Los efectos de estas pruebas sobre la salud se desconocen, aunque se sospechan sus graves consecuencias a largo plazo.
En 2006 el producto interior bruto (PIB) era de 81.003 millones de dólares, equivalente a 5.291,50 dólares per cápita (según estimación del Banco Mundial). En tiempos pasados, la economía se basaba casi exclusivamente en la agricultura, pero durante el periodo soviético la economía experimentó una industrialización rápida. La industria, que comprendía sólo el 15% de la producción, a finales de la década de 1920, constituye hoy el sector más productivo de la economía. En 2006 aportaba el 42% al PIB. El 18% de la población activa trabajaba en este sector. La minería es el sector más importante de la industria: la República tiene las reservas más grandes de cromo, tungsteno, cobre, plomo y cinc de la antigua URSS; otros minerales extraídos son carbón, manganeso, níquel, mineral de hierro, cromo, espato de Islandia y cobalto. Los yacimientos de petróleo y gas natural se descubrieron en 1960 en la costa del mar Caspio. El canal del Irtish-Qaraghandy, la vía de agua más grande en la antigua URSS en términos de volumen, se construyó para dar servicio a las actividades mineras en la zona septentrional del centro del país. Las prospecciones recientes confirmaron que estos depósitos son muy abundantes, lo que ha hecho que varias multinacionales formen empresas conjuntas con socios kazakos para explotar los recursos petrolíferos. La capacidad de refinado, que no encuentra demanda interior, está programada para una rápida expansión. Otros sectores industriales importantes en Kazajstán son el cemento, el hierro y el acero, abonos minerales y tejidos. La República alberga las instalaciones espaciales de Baikonur, que eran el principal centro de estas características en la antigua URSS.
La actividad agrícola, que supone un 6% del producto interior bruto y ocupa a un 32% de la población activa, ha cambiado de una manera drástica durante este siglo. Antes de 1920, la actividad agropecuaria se componía en su mayor parte del pastoreo de rebaños nómadas. La lana, la carne, la leche y otros productos de la ganadería son todavía los principales artículos agropecuarios, pero el estilo de vida nómada ha desaparecido casi por completo. Durante el periodo soviético los campos de cultivo se expandieron mucho, debido en parte a la gran mecanización y a la construcción de proyectos de regadío a gran escala. Su principal producto es el trigo (13,5 millones de t), que se cultiva principalmente en el norte. Otros cultivos son el arroz (320.000 t) y el algodón (140.000 t), cultivados en las tierras de regadío del sur.
Aunque Kazajstán es una de las antiguas repúblicas soviéticas más modernas de Asia central, la reforma económica avanza muy despacio. La privatización masiva, que tuvo una difusión muy rápida en el primer año de independencia, se suspendió a comienzos de 1993; se reactivó en noviembre de ese año, cuando el gobierno empezó a distribuir bonos de privatización, pero la mayoría de las propiedades que han sido repartidas por el gobierno están aún sometidas a algún tipo de control gubernamental. El Estado mantiene un interés preferente en muchas de las propiedades privatizadas, por lo que un sistema de contratos de control estatal todavía determina, en gran medida, la producción y las formas de distribución. El país emitió su propia moneda, el tenge, en noviembre de 1993; la moneda oficial anterior, el rublo kazako, era una moneda paralela al rublo ruso que se acuñaba en Rusia. El tenge se emitió con un valor de 500 rublos para cada unidad. En 2006, 126,10 tenges equivalían a 1 dólar estadounidense.
Kazajstán se ha integrado mucho en la economía mundial; la inversión extranjera se ha incrementado, sobre todo en los sectores petrolíferos y de gas natural. A comienzos de 1993, la corporación Chevron, una compañía petrolífera estadounidense, y el gobierno kazako firmaron un acuerdo de explotación y desarrollo conjunto del inmenso campo petrolífero de Tengiz. En enero de 1994, se estableció una zona de libre comercio entre Uzbekistán y Kazajstán, a la que pronto se unió Kirguizistán.
Kazajstán adoptó una nueva Constitución, que sustituyó a la de 1993, en agosto de 1995. Según ésta, se elige un presidente por sufragio universal para un mandato de cinco años, el cual desempeña las funciones de jefe de Estado y nombra un primer ministro que dirige el consejo de ministros, cuyos miembros son elegidos por el primer ministro y por el presidente de la República. El nuevo texto constitucional introdujo, además, grandes cambios en los órganos del poder legislativo, por cuanto la única cámara existente hasta esa fecha, denominada Kenges Suprema, y sus 177 miembros elegidos para un periodo de cinco años, fueron sustituidos por un cuerpo legislativo bicameral, integrado por la Asamblea (Mazhilis), que tiene 77 escaños, y por el Senado (47 miembros, de los cuales 7 son designados por el presidente). Desde 1991 Kazajstán es miembro de la Comunidad de Estados Independientes (CEI).
La región que hoy es Kazajstán fue colonizada por las tribus turcas desde el siglo VIII d.C. y se incorporó al Imperio mongol de Gengis Kan en el siglo XIII. Los kazakos, una mezcla de pueblos mongoles y turcos, surgieron en torno al siglo XV. Las incursiones rusas en el actual territorio de Kazajstán comenzaron en el siglo XVI, cuando los cosacos se asentaron a lo largo del río Ural en la parte occidental del país. A finales del siglo XVII se habían desarrollado relaciones formales entre el gobierno zarista de Rusia y los cosacos, quienes protegieron la frontera rusa a cambio del título de propiedad de la tierra y la autonomía local. En el siglo XVIII se establecieron una serie de fortificaciones y asentamientos cosacos que cruzaban la frontera norte de la región de la estepa en Kazajstán, con la finalidad de defender la frontera rusa contra las bandas de merodeadores de kazakos y otros pueblos nómadas. Esta frontera permaneció inalterada durante 70 años. Sin embargo, hacia 1830 las tropas rusas desarrollaron una ofensiva a gran escala hacia el sur, por lo que en 1866 la mayoría de Kazajstán estaba bajo su control. Los puestos fronterizos cosacos se transformaron en asentamientos de campesinos cuando los rusos y otros inmigrantes eslavos se desplazaron a la estepa cada vez en mayor número. En el periodo comprendido entre 1906 y 1914, el promedio de colonizadores era de 140.000 personas al año, aunque alrededor de una quinta parte de éstos con el tiempo regresaban a la Rusia europea.
Las desavenencias y tensiones entre los kazakos y los nuevos colonizadores se exacerbaron en 1916 debido a un decreto gubernamental por el que se reclutaba a los kazakos para el servicio militar. Como represalia por el decreto, éstos atacaron y mataron a miles de colonos eslavos. El gobierno zarista respondió mediante la expulsión de 300.000 kazakos de sus posesiones, muchos de los cuales se asentaron en la provincia china de Xinjiang. En 1917, los colonizadores rusos respondieron a los asesinatos y mataron a unos 80.000 kazakos que volvían de China.
En 1918, se estableció una república autónoma en el este de Kazajstán, pero fue rápidamente ocupada por las tropas bolcheviques. En 1920 el área de los límites actuales de Kazajstán se organizó como una república autónoma, que hasta 1925 se conoció como la República Socialista Soviética Autónoma (RSSA) Kirgiz. En 1936, fue admitida en la URSS como una república más.
A finales de la década de 1920 las autoridades soviéticas bajo el régimen de Stalin desarrollaron una política de colonización y colectivización forzada de la población kazaka. Como consecuencia, la política, la cultura y el estilo de vida kazako quedó prácticamente extinguido. Cientos de miles de kazakos murieron o se refugiaron en China. En 1954 el gobierno soviético lanzó el Programa de Tierras Vírgenes e Improductivas, que exigía un rápido incremento de la cantidad de terrenos para cultivar en Siberia occidental y Kazajstán. Una ola de inmigrantes eslavos se asentó en la República, y llegaron a constituir el grupo étnico más grande del país, aunque los kazakos pronto ocuparon el primer lugar.
En 1990, Nursultan A. Nazarbayev se convirtió en presidente de la República Socialista Soviética de Kazajstán. Concurrió sin oposición en las primeras elecciones presidenciales democráticas celebradas en diciembre de 1991 y obtuvo el 95% de los votos. Kazajstán declaró su independencia un mes después, poco antes del desmembramiento de la URSS. Desde la presidencia del país, Nazarbayev permitió la libertad de expresión y de reunión para todos los grupos excepto para los rusos y los extremistas nacionalistas kazakos. Algunos cosacos rusos pidieron la anexión del norte del territorio a Rusia, mientras que los extremistas kazakos solicitaron la expulsión de los no musulmanes de Kazajstán. Nazarbayev toleró las duras críticas de su programa en la prensa popular, pero prohibió cualquier actividad que pudiera fomentar el recelo étnico. Estableció una estrecha relación económica, militar y política entre Kazajstán y Rusia, a pesar de la oposición de los nacionalistas kazakos, aunque surgió una desavenencia con Rusia sobre el control de la instalación espacial de Baikonur tras la independencia.
En diciembre de 1993, Kazajstán ratificó el Tratado de No Proliferación Nuclear. En un esfuerzo para promocionar el desarme nuclear, la reforma económica y el desarrollo de las instituciones democráticas, Estados Unidos triplicó su ayuda a Kazajstán en febrero de 1994, aprovechando la llegada a Washington de Nazarbayev para firmar el Tratado de No Proliferación Nuclear. En marzo de ese año, el presidente kazako propuso que algunos de los estados miembros de la CEI formaran una Unión Euroasiática para integrar de una forma más estrecha la economía de estos países. Ese mismo mes, Rusia y Kazajstán firmaron un acuerdo que otorgaba a la primera el control del complejo espacial durante 20 años por un coste de 115 millones de dólares anuales. No obstante, una parte del arsenal nuclear de la antigua URSS se mantuvo desplegado en suelo kazako. Sin embargo, según los términos del tratado de 1992, Kazajstán destruiría todas sus armas nucleares o las transferiría al control ruso en un plazo de siete años. Desde junio de 1995, Kazajstán se encuentra militarmente desnuclearizado.
En marzo de 1994 se celebraron elecciones para una nueva legislatura que reemplazó a los 360 miembros de la asamblea heredada de la era soviética. Los seguidores de Nazarbayev obtuvieron al menos dos tercios de los escaños. Ese mismo mes el presidente disolvió el Parlamento después de que el Tribunal Constitucional del país declarara ilegales las elecciones generales celebradas con anterioridad. Esto provocó que los parlamentarios de la oposición intentaran la formación de una asamblea alternativa.
La crisis política se resolvió en abril de 1995, cuando Nazarbayev obtuvo, gracias al referéndum que había convocado, una prórroga en su mandato presidencial hasta el año 2001. En agosto del mismo año Kazajstán se dotó de una nueva Constitución, y en diciembre se celebraron elecciones legislativas, en las que los partidos progubernamentales (Partido de Unidad Nacional y Partido Democrático) vencieron de forma arrolladora a los de la oposición (Partido Socialista, Partido Comunista y Partido de la Armonía, este último representante de la minoría rusa). La reforma de la administración, la estabilización económica y la extensión de la cultura kazaka fueron los ejes de actuación de la mayoría parlamentaria.
En marzo de 1996, el presidente Nazarbayev firmó, junto con los de Rusia (Borís Yeltsin), Bielorrusia (Aleksandr Lukashenko) y Kirguizistán (Askar Akáiev), un tratado para profundizar en la integración entre los cuatro países. Asimismo, se intensificaron las relaciones con los vecinos más próximos (Kirguizistán y Uzbekistán), así como con Irán y China.
Nazarbayev obtuvo la victoria en las elecciones presidenciales celebradas en enero de 1999 y diciembre de 2005, que los observadores enviados por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) no pudieron calificar de plenamente democráticas. En mayo de 2007, el Parlamento aprobó una enmienda constitucional que permitiría al presidente presentarse ilimitadamente a la reelección. En agosto de ese mismo año, se desarrollaron elecciones legislativas, que supusieron una contundente victoria del partido oficialista Nur Otan (Luz de la Patria, llamado Partido de la Patria desde 1999 hasta 2006).